Terapia cognitiva

La terapia cognitivo conductual pretende ayudar tanto al enfermo como al cuidador.

Para el cuidador adaptarse a nuevas actividades y responsabilidades, así como sustituir las que realizaba el enfermo, incluso adaptarse a un nuevo estilo de vida, le genera estrés. Estos cambios producen sentimientos, temor, culpa, irritabilidad, tristeza y sensación de impotencia.

Casi la mitad de los cuidadores son cuidadores únicos, y la problemática familiar es causa del alejamiento de los familiares hacia el afectado por la enfermedad. El cuidador haría más por el enfermo, sin embargo, no sabe cómo.

Mediante esta terapia se pueden desarrollar estrategias de detección de sobrecarga en el cuidador, mejorando la calidad de vida tanto del cuidador como de la persona dependiente.